La cebolla es una verdura muy benéfica pero para algunos desagradable y para otros deliciosa; es de un sabor y olor fuerte desde el primer momento en que retiramos su primera capa y comenzamos a cortarla nuestros ojos empiezan a irritarse y a lagrimear. El motivo lo encontramos en un gas irritante conocido con el nombre de alinasa, que respiramos al momento de cortar las cebollas. Para no llorar cuando picamos cebolla debemos meterla un par de minutos al congelador.
Ahora, si el olor y sabor nos desagrada pero queremos consumirla por sus beneficios combatiendo el estreñimiento o teniendo un buen funcionamiento en los riñones, podemos disminuir el olor y sabor desflemando la cebolla: Coloca la cebolla en un recipiente, cúbrela con agua y agrega una pizca de sal, déjala desflemar durante cinco minutos, luego quita el agua y enjuaga.